¿Cuáles son sus síntomas?
Los síntomas y signos son variados y múltiples. En algunas ocasiones, se requiere alto índice de sospecha, principalmente en las vasculitis poco frecuentes.
Podemos encontrar artritis, úlceras en los dedos, falta de irrigación de diversos órganos, púrpura palpable (pequeños sangrados, principalmente en piernas), problemas de pulmón con falta de aire y sangrado, afección renal con pérdida de proteínas en la orina, sensación dolorosa y quemante en brazos y piernas.
Como se mencionó anteriormente, el diagnóstico, se efectúa con la clínica del paciente y apoyado por los métodos complementarios, principalmente laboratorio específico y métodos de imagen. Es importante enfatizar, que el diagnóstico es clínico, los análisis y demás estudios apoyarán nuestra sospecha clínica.
¿Tienen tratamiento?
Existen varias opciones de tratamiento, con múltiples medicamentos que han demostrado ser eficaces en diferentes estudios clínicos publicados. Todo dependerá del tipo de vasculitis y del órgano afectado.
Al momento de decidir el tratamiento, también es importante tener en cuenta la edad del paciente.
En general, el tratamiento será necesario por un tiempo prolongado, a veces un par de años, y requerirán modificaciones según como evolucione la enfermedad. Su objetivo es dormir la enfermedad (remisión), de modo tal que se evite el daño del órgano afectado.
En los últimos años, el avance en el conocimiento de estas patologías ha aumentado considerablemente, lo que permitió ser mucho más eficaces y lograr más rápido y mejor los objetivos que se plantean al inicio del tratamiento. Es esperable, que en los años venideros, esto continúe progresando para lograr mejores soluciones para nuestros pacientes.
¿Qué es la vasculitis?